1990

El bastidor oculto aporta al cristal una sensación de inédita ligereza.

“Uno de los retos más estimulantes con que me he encarado ha sido representar el cristal, material sólido y pesado, como estéticamente ligero. Y llegar a transmitir al cristal la maravillosa sensación del vuelo” explica Gabriele Centazzo, diseñador de Valcucine.
Para lograr el intento, hemos revolucionado el mismo concepto de puerta, inventando la primera puerta desmaterializada donde la estructura se reduce a lo esencial y la pura “masa vítrea” es soportada por un bastidor de aluminio, que por fuera no se ve.  

Aprovechando la mayor altura del cristal respecto a la estructura del bastidor, en la parte superior de la puerta hemos obtenido una apertura invisible y ergonómica.
Los cristales parecen estar suspendidos y producen una sensación de sorprendente liviandad, para cocinas elegantes y funcionales.